Comité PCE (m-l) – Castilla y León
Villalar resiste, resiste la ofensiva de la Junta de Castilla y León (PP-VOX). Lo intentó el pasado año. Este tomó la decisión de descentralizar el Día de la comunidad, con el fin de debilitar a Villalar. ¿Por qué? Porque Villalar es una fiesta eminentemente popular, del pueblo, y una fiesta reivindicativa; porque las clases populares que lo llenan son potencialmente una fuerza revolucionaria y Villalar es un espacio donde se ven manifestaciones de esa fuerza; porque es un espacio de libertad de expresión, donde se lanzan discursos políticos, debates o se realizan actividades críticos con el statu quo; un espacio que recoge y es altavoz de los conflictos laborales, sociales,…, de la comunidad.
Ellos, representan su antítesis, a los señoritos, a los restos de la casposa nobleza (aún existente en esta dolorida España), a los magnates, a los que hacen de nuestra tierra su feudo, su cortijo, y quieren que sus gentes seamos sus vasallos; ellos quieren silenciar la voz del pueblo, las reivindicaciones y protestas, que van contra sus protegidos. Por eso odian los que es y representa Villalar e intentan cercenarlo como sea.
Estos que se les llena la boca con el campo, con la patria,…, son sus peores enemigos. “En los trances duros, los señoritos invocan la patria y la vende. El pueblo no la nombra siquiera, pero la compra con su sangre y la salva” (A. Machado, dixit). PP y Vox, Vox y PP, tanto monta, monta tanto, Isabel como Fernando (viene la expresión como anillo al dedo pues fueron los abuelos del que pasó a cuchillo a los líderes comuneros Bravo, Padilla y Maldonado).
Pero las gentes del pueblo, las gentes trabajadoras de Castilla y León han permanecido firmes. ¿Cuál ha sido su respuesta? Su asistencia masiva, por decenas de miles, a la campa y al pueblo de Villalar de los Comuneros este 23 de abril.
El PCE (m-l), la JCE (m-l) y los compañeros del Colectivo Republicano de Salamanca estuvimos, como todos los años, en la campa, repartiendo nuestra propaganda, vendiendo nuestros materiales, debatiendo, confraternizando y poniendo nuestro granito de arena a un día de fiesta pero también de lucha.
El gobierno de la comunidad quiere apagar la llama de Villalar y dispersó la fiesta organizando actos, sobre todo de carácter institucional, en las distintas capitales de provincia, buscando vaciar de contenido, de financiación, a Villalar, e institucionalizar el Día Festivo. CCOO, UGT y el PSOE anunciaban días antes que abandonaban la Fundación Castilla y León (antes Fundación Villalar) porque se le quitaba su razón de ser.
La actitud del gobierno autonómico hacia Villalar no es un hecho aislado, forma parte de un programa político, a nivel estatal, de la reacción y del fascismo, que pasa por mutilar derechos y libertades, impedir cualquier atisbo de protesta, cualquier manifestación obrera y popular, y que pondrán en práctica cuando tengan más resortes de poder. Pero que nadie se engañe, el régimen monárquico actual, que les complace, incubó el huevo del fascismo, que siempre estuvo ahí; solo se puede acabar con él, abrir las puertas a una verdadera democracia si, unidos, organizados, superamos el régimen del 78.
A pesar de las artimañas del fascismo y la reacción, Villalar 2024 ha sido un éxito. Como se oyó decir a una señora mayor: “¡Que se jodan!”.
¡Viva Villalar!
