Cté. de Euskadi del PCE (m-l)
Multitudinarias manifestaciones se han celebrado el sábado 25 de febrero en las tres capitales vascas en defensa del sistema público de salud
Convocadas por los sindicatos del sector y de clase y apoyadas por numerosos colectivos sociales, se han realizado el pasado sábado 25 de febrero multitudinarias manifestaciones en las tres capitales vascas que suponen una continuidad de las numerosas protestas que se han venido celebrando en distintas localidades del territorio, en defensa del sistema público de salud y en contra de las privatizaciones del sector sanitario.
Junto a reivindicaciones sectoriales, como la que se pueden producir en otros ámbitos en lucha como el del metal, asistencia domiciliaria o residencial, tales como una precariedad laboral que supera el 50%, pérdida del poder adquisitivo del 20% en la última década, sobrecargas de trabajo, bloqueo de la mesa de negociación sectorial, desarrollo profesional, nuevas OPEs sin haber resuelto las anteriores, etc, también se reivindica una defensa de la sanidad pública y se critican la deriva privatizadora de la sanidad pública vasca.
Para el PCE (m-l) esta deriva privatizadora de nuestra sanidad no se trata, como algunos nos quieren hacer creer, por una mala gestión o tener unos gestores ineficaces, sino que muy al contrario, lo están haciendo muy bien, ya que su objetivo es claro, deteriorar los más posible la sanidad pública para favorecer el negocio de la sanidad privada, y hay que reconocer que lo están haciendo muy bien ya que han conseguido que uno de cada tres vizcaínos tenga ya contratado un seguro privado de salud. Para ello solo han tenido que gota a gota ir deteriorando no solo la atención primaria con demoras en las citas que es ya de hasta 14 días, sino el resto de servicios sanitarios como las urgencias y atención hospitalaria, consultas externas, pruebas diagnósticas, solo vamos a poner un ejemplo, las pruebas diagnósticas de prevención del cáncer de mama tienen un retraso de 11 meses.
El PCE (m-l) estuvo presente en dichas manifestaciones repartiendo nuestro comunicado por una sanidad pública y de calidad que fue muy bien acogido, y apoyando una sanidad pública de calidad.
Lamentables han sido las declaraciones de la Consejera de Salud del Gobierno Vasco, Gotzone, Sagardui que, ante la masiva presencia de la ciudadanía en las manifestaciones convocadas, niega tanto la privatización de la sanidad vasca como su deterioro. Siendo bien pensados, solo podemos interpretar dichas declaraciones como que Gotzone Sagardui goza de sanidad privada y no ha necesitado hacer usos del sistema público de salud y de ahí su desconocimiento, o bien tiene ya contratado un sistema privado del que hace uso para evitar todas las demoras del sistema que ella misma gestiona. Esa misma Consejera que presume de tener el mejor sistema de salud, y así ha sido y reconocido durante muchos años, a día de hoy le podemos recordar que en Euskadi tenemos 3,1 camas hospitalarias por cada 100.000 habitantes cuando la media europea es de 4,1. La consejera se excusa de la falta de profesionales para contratar en algunas especialidades, pero es consecuencia de decisiones políticas tomadas por parte del Departamento de Salud y que con una plantilla cada vez más envejecida, el PNV pretende ahora solucionarlo como no, con una nueva privatización, en este caso en detrimento de la Universidad Pública Vasca.
Tenemos que luchar para evitar que se consolide un doble sistema asistencial, donde las clases que pudientes dispongan de un sistema de calidad y meramente asistencial para las clases más desfavorecidas.