PCE (m-l) y PCPV seguimos defendiendo la necesidad de abordar con claridad, entre nosotros y de cara a la clase obrera, las cuestiones relacionadas con el régimen político. Consideramos que, obrando de otro modo, desligando esta cuestión de las necesarias respuestas cotidianas a los problemas inmediatos que vive nuestra clase, estaríamos engañando a los trabajadores con falsas ilusiones que los llevarían a un callejón sin salida.
Las direcciones comarcales del PCPV y el PCE (m-l) en el Baix Vinalopó se han reunido esta semana para analizar la situación política general y en nuestro territorio en particular, así como para contrastar propuestas de trabajo de cara al futuro inmediato.
Ambos partidos coincidimos en la valoración de que nos hallamos en un contexto complicado para la acción de los comunistas. Consideramos que ello se debe tanto al cansancio de los trabajadores, tras años de continua movilización, como a la ofensiva emprendida por ciertas corrientes ideológicas de la pequeña burguesía, y promovida desde los poderes económicos y mediáticos, contra el valor de la acción organizada y para silenciar y neutralizar las propuestas, corrientes y organizaciones que apuestan por una transformación en profundidad del régimen político.
Sin embargo, también consideramos que la situación política va clarificándose, y que cada vez más trabajadores y trabajadoras demandan propuestas claras y contundentes que permitan atacar las causas profundas de la merma de derechos sociales, laborales y democráticos que padecen nuestros pueblos.
En este sentido, PCE (m-l) y PCPV seguimos defendiendo la necesidad de abordar con claridad, entre nosotros y de cara a la clase obrera, las cuestiones relacionadas con el régimen político. Consideramos que, obrando de otro modo, desligando esta cuestión de las necesarias respuestas cotidianas a los problemas inmediatos que vive nuestra clase, estaríamos engañando a los trabajadores con falsas ilusiones que los llevarían a un callejón sin salida. La pérdida de derechos está directamente relacionada con la existencia de un régimen, la monarquía heredera de Franco, que asegura la preeminencia de una oligarquía extremadamente reaccionaria y explotadora y la sumisión de las clases trabajadoras. Por eso, para dar paso a mayores cotas de democracia y justicia social, es necesario deshacerse de la monarquía y del entramado sustentado por la Constitución del 78 para iniciar un proceso constituyente que culmine en la proclamación de la Tercera República: una República de contenido democrático, popular, social y laico, y que reconozca los derechos de los pueblos que conforman el Estado. Una República que facilite la conquista del Socialismo.
En consecuencia, y con este objetivo, ambos partidos hemos alcanzado una serie de acuerdos prácticos que se pueden resumir en los siguientes puntos:
- Retomar acciones y foros, como la Junta Republicana, que permitan visualizar y abordar la relación directa que existe entre los problemas cotidianos de los trabajadores y el régimen político.
- Ante el próximo ciclo electoral, y retomando los acuerdos suscritos por diversas organizaciones el pasado junio en Rivas, vamos a hacer cuanto esté en nuestra mano para que estas elecciones sirvan al objetivo de acumular fuerzas para avanzar hacia la República.
- En relación con este fin, vamos a trabajar para que, en las próximas elecciones, los partidos de la oligarquía, PP y PSOE, tengan enfrente en nuestra comarca candidaturas amplias, de Unidad Popular, en las que las organizaciones políticas y sociales de la izquierda puedan aportar sus experiencias, programas y militancia, en asociación y cooperación con otras entidades populares, y que planteen abiertamente el objetivo de acabar con este régimen monárquico caduco y corrupto, a partir del trabajo en los municipios, para hacer realidad la República.
Elx, enero de 2015