Por Julio Calafat
Decía Epicteto: «La verdad triunfa por sí misma; la mentira necesita siempre complicidad. “
Y Platón afirmaba: «Yo declaro que la justicia no es otra cosa que la conveniencia del más fuerte.»
La sentencia en el caso aplicada a la, (iba a decir fámula, pero no), consorte del truhan Urdargarín, es un claro ejemplo de las dos citas que encabezan esta nota. La absuelven de todas las acusaciones, pero se contradicen al condenarla a una multa (ridícula, pero multa, al fin y al cabo). La esposa del truhan, firmaba como dirigente del tinglado mafioso montado por su marido y sus socios, firmaba los documentos, etc., incluso incluía en la nómina del tinglado, a sus sirvientes.
Pero ella, la pobre, no sabía lo que firmaba; hacía lo que la mandaba el truhan, no leía lo escrito, ni se le ocurría preguntar. La excusa utilizada por sus abogados, es que lo hacía por amor. La han hecho pasar por ignorante. Pero su currículum, muestra todo lo contrario a la ignorancia: Licenciada en Ciencias Políticas (Madrid); máster en relaciones internacionales por la Universidad de Nueva York; prácticas en la sede de la UNESCO (París); diez años de ejecutiva en la Caixa; colaboradora de la fundación Aga Khan (Ginebra), domina, dicen, varios idiomas.
Pero no se enteraba de lo que firmaba- La han librado de la cárcel (como lo van a hacer con el truhan), pero será, como escribe un periodista nada sospechoso de ser antimonárquico conocida como «la real tonta, ciega, sorda y muda de la Familia Real».
La vergonzosa sentencia que absuelve a la consorte del truhan, puede sentar jurisprudencia: a la mujer de Luis Bárcenas, así como la exministra de sanidad, Ana Mato, y otras más, las bastará con hacerse las tontas, sordas, ciegas, etc., para ser absueltas. Estos días, con motivo del sonado juicio, se ha repetido por todas partes lo de que la justicia es igual para todos; las sentencias no.
Unas palabras, casi de chiste: Al truhan condenado…le han prohibido salir de las fronteras de la UE. Y le autorizan a vivir en Ginebra, sin necesidad de presentarse a un juzgado de España cada mes, sino a uno suizo. Supongo que sus señorías saben que Suiza no está en la UE, ¿entonces?