Artículo publicado en «Scintilla!», órgano de la Plataforma Comunista por el Partido Comunista del Proletariado de Italia
La propaganda revolucionaria escrita juega un papel decisivo para promover ideas y propuestas comunistas, en el desarrollo de la actividad dirigente de la clase obrera, en la lucha contra el imperialismo, la burguesía, la reacción y el fascismo. Así como la lucha por el Partido no puede desarrollarse sin transmitir las ideas revolucionarias, no será ni siquiera posible alcanzar el socialismo si no se han difundido sus conceptos entre la clase trabajadora y las masas marxistas-leninistas.
El periódico político es el punto de partida de nuestra actividad. Participamos en la vida política con nuestra prensa y propaganda. En torno al periódico debemos añadir un número cada vez mayor de colaboradores, voluntarios, redactores, etc., a través de los cuales será posible llevar a cabo esa propaganda y esa agitación multifacética que son las tareas urgentes, principales y permanentes de nuestro movimiento. Una de las funciones de la propaganda comunista es el desarrollo de las condiciones subjetivas de la revolución proletaria, la más importante de las cuales es la formación del Partido Comunista.
La actividad propagandística de los comunistas está destinada principalmente a la clase trabajadora para inculcar su conciencia de clase revolucionaria, adquirir nuevas fuerzas y victorias en todos los campos.
Con la propaganda impulsamos la acción, la organización, la unidad y la lucha de todos los explotados, creamos las condiciones para la aparición de la vanguardia de la clase trabajadora, orientamos y guiamos a las masas explotadas y oprimidas en la lucha para la conquista del poder político y el establecimiento de la dictadura del proletariado.
Ciertamente los medios de comunicación se han fortalecido y diferenciado gradualmente, con el desarrollo de las fuerzas productivas, de las innovaciones en ciencia y tecnología en los últimos tiempos, especialmente con el papel que juegan internet y las redes sociales. Sin embargo, sin renunciar al uso de estos nuevos y diferentes medios, como lo hacemos nosotros, debemos insistir en el periódico, en su regularidad, su calidad como vehículo de unificación ideológica, política y organizativa de los comunistas y proletarios avanzados, por la organización de las masas, por la lucha de clases de trabajadoras.
Veamos algunas tareas permanentes a cumplir con el periódico comunista “Scintilla”
En primer lugar, el periódico debe leerse con atención, en todos los sentidos. En parte, para estar plenamente informado sobre las opiniones, puntos de vista, análisis y orientaciones de los comunistas con el fin de fortalecer el conocimiento sobre situación concreta en la que desarrollamos nuestra actividad, y obtener de los artículos las directrices para la acción, para el desarrollo, extensión y dirección de las luchas de masas.
La prensa comunista es un elemento importante de la educación política, por lo que hay que utilizar el periódico y aprovechar adecuadamente los temas que aparecen en él para crear círculos de lectura y discusión política en común con grupos de lectores, amigos y seguidores.
En segundo lugar, el periódico debe reproducirse y distribuirse ágilmente. Esto es necesario mejorarlo cada vez más, con una red de distribución de prensa comunista, ideando soluciones prácticas para ponerlo en manos de los trabajadores (particularmente los más avanzados), ampliando progresivamente el radio de su influencia y teniendo como guía las prioridades organizativas y políticas. Esta distribución amplia, constante y ágil resulta cada vez más necesaria si tenemos en cuenta que el periódico cumplirá plenamente su papel si alcanza su destino rápida y adecuadamente, considerando la velocidad con la que se desarrollan los eventos políticos y la necesidad de que tienen a los comunistas (marxistas-Ieninistas) de influir y conectar con los protagonistas de luchas obreras y populares.
En tercer lugar, debemos ampliar su alcance para ampliar el radio de influencia de la propaganda comunista. Todos los militantes y los simpatizantes activos tienen el deber de trabajar para ampliar la difusión del periódico político, utilizando los más variados medios, llevándolo allí donde haya trabajadores explotados y oprimidos, publicitándolo en lugares de trabajo y barrios de clase trabajadora, reproducir sus artículos, fotocopiarlos, hacerlos folletos, carteles, escritos, usándolos para periódicos locales, murales, etc., para hacer llegar a todas partes la voz de los comunistas (marxistas-leninistas) con inventiva y creatividad. De gran importancia son también los carteles y reproducciones de páginas del periódico que mejor se adapten a cada situación. También es necesario encontrar foros de lectura estables, donde los lectores proletarios puedan encontrar periódicamente «Scintilla». El periódico también juega un papel importante en la agitación y propaganda oral.
Esta tarea debe ser ordenada y planificada, buscando siempre al desarrollo de la organización comunista.
En cuarto lugar, el periódico es una herramienta de autofinanciamiento. Es un principio revolucionario a partir del cual depende la publicación seria y regular de la prensa Comunista. No basta con difundir el periódico de una manera organizada, hay que venderlo, recaudar fondos. Esto implica una acción militante, audaz y decidida para buscar apoyo económico entre los lectores. La venta del periódico político a nuevos sectores, la presencia sistemática en eventos y recogida de suscripciones para la prensa comunista, el aumento de las suscripciones (que cada abonado traiga al menos a uno más), constituyen la fuente de la política financiera de nuestro medio. La recopilación y centralización de los ingresos por ventas son tareas inevitables y permanentes.
En quinto lugar, el periódico vive y se desarrolla sobre la base de las contribuciones escritas recibidas. Colaborar con el periódico significa establecer, a través de canales orgánicos, una correspondencia regular con información escrita de primera mano en el sentido actual y no literario; las cartas, las denuncias, las opiniones, sugerencias, fotografías, entrevistas con protagonistas de las luchas, las investigaciones obreras, muestran nuestra vitalidad, fortalecen el vínculo con las masas y contribuyen a crear un periódico vivo, una expresión real de la vanguardia de la clase proletaria.
Para cumplir esta tarea hay que erradicar una concepción errónea que se tiene del periódico comunista, como si fuera una mercancía que un cliente pasivo evalúa declarándose satisfecho o no. La relación con los lectores debe invertirse respecto a los periódicos burgueses: no son cerebros para rellenar, sino creadores del periódico del proletariado revolucionario.
Ahora, camaradas, os invitamos a tomar parte activa en la realización del periódico comunista “Scintilla”!