Secretariado del CC del PCE (m-l)
El ejército nazi sionista que lleva a cabo una atroz matanza contra el pueblo palestino, ha atacado de nuevo Irán con la excusa de evitar que este país pueda construir armamento nuclear, un armamento del que ya dispone Israel, contraviniendo, también en esta materia, los acuerdos internacionales.
Este ataque, junto el reciente control de Siria por las facciones más fanáticas de las fuerzas islamistas, apoyadas militarmente por Israel y contrarias al corrupto régimen de Al Asad, supone un radical cambio de la correlación de fuerzas en una zona, el oriente medio, de vital importancia en la guerra por las áreas de influencia entre las potencias imperialista, por cuanto en ella confluyen los tres continentes: Europa, África y Asia, donde se libran las principales escaramuzas de ese conflicto permanente. Es pues, un paso más en el sentido de extensión del conflicto militar entre las potencias imperialistas, que acerca al mundo a una guerra global.
Ese ataque no hubiera sido posible sin el apoyo político y el soporte militar de EEUU; pero tampoco sin el conocimiento y la complicidad tácita del resto de potencias, incluidas las que encabezan el enfrentamiento con el imperialismo yanqui: China y Rusia, en particular.
El imperialismo occidental encuentra en el nazisionismo un fiel servidor al que ayudan a llevar a cabo sus propios intereses de exterminio y expulsión de los pueblos de la zona a sangre y fuego. Esa es la razón por la que, después de casi dos años de sistemáticos crímenes contra la humanidad y violación de cualquier ley de guerra, ninguno de los estados que cínicamente critican sus fechorías, haya dado el menor paso efectivo por aislar a un elemento tan repugnante y peligroso para los pueblos, como el Estado de Israel; esa es la razón por la que todo se limita a inútiles declaraciones de los gobiernos, pero ninguna potencia ha roto las relaciones diplomáticas y militares con ese régimen genocida; tampoco Rusia, o China (esto es algo que, cínicamente callan todos los radical oportunistas que nos sermonean con el “eje de resistencia”).
Hoy por hoy, no está en manos de los pueblos el poner fin a esta salvaje escalada de la militarización y de la guerra, pero debemos tenerlo en cuenta para ir construyendo la resistencia contra el capitalismo imperialista, su miseria y su guerra. Nos va en ello el futuro.
¡ALTO AL NAZISIONISMO!
¡RUPTURA DE RELACIONES CON ISRAEL!
¡SOLIDARIDAD CON LOS PUEBLOS GOLPEADOS POR EL IMPERIALISMO!
13 de junio de 2025
Secretariado del CC del PCE (m-l)