En la visita de Obama a España, no todo han sido bienvenidas y cámaras de televisión. En Madrid, el día 10 a las 12.30h, en medio de extraordinarias medidas de seguridad, se celebró la concentración que había sido convocada por las Marchas de la Dignidad 22M y la Plataforma contra el TTIP y apoyada por numerosas organizaciones, entre ellas nuestro partido.
Los alrededores de la calle Serrano y la Embajada de EEUU estaban blindados con decenas de policías y tanquetas y, para tener acceso a la zona donde estaba convocada la concentración, había que pasar barreras y uno a uno eran registrados todos los manifestantes.
Centenares de personas mostramos la indignación por la visita del “premio Nobel de la paz”, que viene a España tras la reunión de la OTAN en Polonia; una cumbre en cuyo documento final, entre otras lindezas, exigen a los «gobiernos democráticos y aliados» que aumenten sus gastos en defensa hasta el 2% del PIB.
En dicho documento se dice que la OTAN y la UE «son complementarias y se refuerzan mutuamente» en el ámbito político y también en términos militares, y que «la Unión Europea sigue siendo un socio único y esencial para la OTAN». Difícil malabarismo tienen que hacer los que claman que «otra Europa es posible» bajo el capitalismo, con la OTAN…
Gritos de «OTAN no, bases fuera», contra la guerra y los tratados comerciales como el TTIP, «el imperialismo es el terrorismo»… jalonaron las distintas intervenciones.
El manifiesto unitario de las Marchas del 22M denunció la sangre y el horror que acompañan al representante del imperialismo yanqui, por las masacres de los pueblos de Irak, Afganistán, Libia, Siria… que han visto sus vidas aniquiladas, sus casas, sus escuelas, sus hospitales y su cultura destruidos y saqueados sus recursos. Guantánamo, Rota, Morón, TTIP, OTAN… El comunicado fue desgranando las razones por las que estábamos allí.
Lola Val, en representación del PCE (m-l), afirmó en su intervención:
«El Partido Comunista de España (marxista-leninista) considera que la lucha contra el imperialismo, sea cual sea, es imprescindible para la defensa de los intereses de los pueblos.
En España, la oposición a la OTAN y la exigencia de la ruptura de los Acuerdos hispano-yanquis, que convierten nuestro país en plataforma de agresión contra los pueblos, es una tarea indispensable en la política de las organizaciones de izquierda, y a la que ningún equilibrio táctico puede llevarles a renunciar».
En un ambiente combativo, entre intervenciones de las distintas organizaciones participantes y canciones, se puso fin a la concentración.
Mientras tanto, el que iba a «asaltar los cielos» rendía su pleitesía al jefe del imperio y conseguía tres minutos de gloria para lanzarlos por las redes sociales…
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