Comunicado del PCE (m-l)
Las recientes declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, amenazando con una intervención militar contra el gobierno venezolano, al que acusa de ser un régimen implicado directamente en el narcotráfico, supone un paso más en la escalada de agresiones que la administración norteamericana lleva a contra el gobierno de Nicolás Maduro. Aprovechando la crisis sanitaria por la que atraviesa el país latinoamericano, y el mundo entero, Trump ha movilizado fuerzas navales en el Caribe para intimidar al gobierno y al pueblo venezolano y, al parecer, ha desplegado tropas en la frontera de Colombia.
Desde el inicio de la “revolución bolivariana”, encabezada por Hugo Chávez, Estados Unidos puso en marcha un plan para desestabilizar el régimen que libremente se dio el pueblo de Venezuela. Todos los mecanismos que el imperialismo estadounidense ya utilizó en otras ocasiones, como hizo con el gobierno de Salvador Allende en Chile, se activaron inmediatamente: guerra económica para provocar desabastecimiento, apoyo a los sectores más reaccionarios de la oposición, incitación al golpe militar, campañas de desprestigio en los medios de comunicación internacionales, etc.
No obstante, el régimen y el pueblo venezolano han resistido y no se han doblegado ante las insidias y las amenazas estadounidenses. Por ello, el presidente Trump ya no descarta una intervención militar directa, aprovechando la grave situación mundial provocada por la pandemia del COVID-19. Además, esa operación le serviría para ocultar la catástrofe humana que se cierne sobre su país, debido a un sistema sanitario básicamente privado y que priva de asistencia médica a millones de ciudadanos.
El imperialismo estadounidense muestra una vez más el desprecio que siente por la independencia nacional, la soberanía popular y el derecho internacional, que prohíbe expresamente la injerencia en los asuntos internos de otros países. El gobierno de Estados Unidos constituye una amenaza para la paz mundial. Es un Estado terrorista, como ha quedado sobradamente demostrado, sin ir más lejos, durante este corto siglo XXI, que impone sus intereses económicos a sangre y fuego, disfrazando las atrocidades que comente bajo la defensa de la democracia y los derechos humanos.
El Partido Comunista de España (marxista-leninista) condena esta nueva agresión del gobierno estadounidense y expresa su solidaridad con el pueblo venezolano, que es el sujeto soberano para decidir el destino de su patria. Hacemos un llamamiento a todas las fuerzas progresistas de nuestro país para que condenen sin titubeos las amenazas militares de Trump y muestren su apoyo al pueblo de Venezuela.
El imperialismo es el enemigo de los pueblos, el enemigo de la paz. Solo la unidad de los trabajadores y su lucha pueden derrotarlo.
6 de abril de 2020
Comité Ejecutivo del PCE (m-l)