Partido Comunista de España (marxista-leninista)
El día 15 de Octubre está convocada en Madrid una movilización estatal para exigir del Gobierno que las pensiones suban según el IPC real y que ninguna esté por debajo del Salario Mínimo Interprofesional. Pero la tabla reivindicativa va más allá.
Los incumplimientos de este Gobierno han provocado que se asuma con normalidad que el Sistema Público de Pensiones está en peligro, y que el capital vaya avanzando medidas para imponer sus objetivos de potenciar los fondos privados de pensiones y apropiarse, para la especulación financiera, del ingente dinero que generarán los fondos de pensiones de empresa, tal y como aprobó la práctica totalidad del Parlamento (incluida Unidas Podemos) en Junio pasado. Además, esos fondos servirán de coartada para que la patronal tenga más fácil imponer la “moderación salarial” y continuar descapitalizando los fondos de la Seguridad Social con la excusa de reforzar los privados de empresa.
Precisamente la exigencia de subidas de salarios, acordes como mínimo con el IPC real, está también entre los objetivos del 15 de Octubre, junto con la denuncia del aumento del coste de la vida, del continuo deterioro y privatización de los servicios públicos (especialmente la sanidad), de la negación de facto del derecho a la vivienda a la gente trabajadora. Entre las reivindicaciones del movimiento figuran también la recuperación del dinero del fondo de reserva de pensiones esquilmado por el Estado, jubilación a los 65 años, y menos en aquellos sectores de trabajo penosos o peligrosos, no rebajar la cuantía de la base reguladora, etc.
Cada vez más colectivos y personas del movimiento de pensionistas en lucha asumen que el actual Gobierno no va a cumplir sus compromisos con el pueblo en esta y otras materias de índole social, laboral, económica y política. Por el contrario, se constata que sus medidas de “protección social y de recuperación de derechos laborales” son parches para intentar neutralizar la respuesta en la calle y en los centros de trabajo, para lo que hasta ahora ha contado lamentablemente con la colaboración de las direcciones de CCOO y UGT. Este es también un gobierno que sigue fielmente las directrices de la UE (instrumento político del gran capital europeo), del FMI y Banco mundial, incluida la sumisión a los planes belicistas de USA y OTAN.
Avanzan el convencimiento y la propuesta de que es necesaria una gran respuesta unitaria del conjunto de la clase obrera para hacer valer nuestra fuerza, recuperar de verdad los derechos amenazados y obligar a que se realicen políticas que defiendan nuestros intereses, lo que inevitablemente implica atacar los intereses del gran capital.
Es indudablemente muy positivo que paulatinamente parece recuperarse la combatividad frente a los ataques del capital y su régimen; pero se requiere aún un gran esfuerzo de clarificación, coordinación y organización.
Con todo, debemos tener claro que no conseguiremos nuestros objetivos últimos si no construimos y proponemos una alternativa política unitaria y plural que exprese nuestras reivindicaciones y que se marque como objetivo acabar con el poder de la oligarquía y sustituirlo por el poder obrero y popular. Esa es la gran tarea que tenemos que ir resolviendo.
Aquí y ahora, en el estado español, esa oligarquía tiene en la monarquía la forma concreta de ejercer su poder y control. Corresponde pues oponer a ese régimen un poder alternativo que lo liquide: La Republica al servicio del pueblo trabajador.
¡Paremos la ofensiva del Gobierno, la Banca y la UE contra las pensiones!
¡Por una Huelga General!
¡Sin ruptura no habrá cambio!