Espacio Republicano de Madrid

Una tras otra, todas las señales de agotamiento del Régimen del 78 saltan a la vista: crisis económica de un modelo productivo basado en el turismo de borrachera, crisis sanitaria como punta del iceberg de unos servicios públicos saqueados y privatizados, crisis institucional de una monarquía cuya corrupción infecta las más altas cotas del Estado, crisis política que convierte a las instituciones representativas en meros engranajes de los negocios entre partidos políticos, etc, etc.

Frente a este hundimiento, agónico pero inexorable, el pueblo se resiste a ser arrastrado en la caída del Régimen. Por eso no ha dejado de defender sus derechos y sus libertades aun en los peores momentos de la pandemia; defiendo sus puestos de trabajo, defendiendo la sanidad pública, defendiendo la libertad de expresión y de manifestación, defendiendo la plena democratización de nuestras instituciones empezando por la jefatura del Estado…

Pero todas estas muestras de dignidad popular han sido respondidas sistemáticamente mediante la represión, la violencia y la criminalización. Además, a los ataques directos de las fuerzas represivas se les han unido los de la prensa servil y del fascismo, reverdecido al calor de la impunidad de sus acciones, de su propaganda y de sus representantes políticos. La monarquía española ya no tiene nada que ofrecer al pueblo excepto corrupción, represión y pobreza.

Ya no quedan recambios en la caja de herramientas del Régimen del 78; ha agotado todas las variedades políticas de la izquierda institucional para pacificar el clima social, y ha sacado a la luz todas las opciones de la derecha; desde la presuntamente moderada hasta la más cuartelera y golpista; y todo ello sin lograr detener una podredumbre estructural cada día más visible, más evidente y más infecciosa.

Por todo esto y mucho más, la Tercera República ha dejado de ser un deseo, para ser una urgente necesidad popular; la necesidad de sanear la podredumbre estructural, de limpiar las instituciones de corrupción y de vislumbrar un futuro para nuestro país. Una necesidad de poner las instituciones al servicio del pueblo, empezando por las familias trabajadoras privadas del derecho al trabajo digno; de dotar económicamente los servicios públicos de calidad que se necesitan; de derogar las leyes represivas que nos amordazan y las reformas laborales que nos explotan; de garantizar el acceso a los derechos básicos para una vida digna, como la vivienda o el transporte; de reorientar la política exterior del país hacia la convivencia internacional, renunciando a la guerra como instrumento político, directamente o a través de alianzas militares; de recuperar la soberanía económica frente a la sumisión a los especuladores y acreedores internacionales; etc.

La Tercera República ya no es negociable; es una necesidad imperiosa en la que no cabe ningún referéndum organizado por el Régimen saliente. La Tercera República es el futuro de Fraternidad, Legitimidad y Solidaridad entre ciudadanos libres e iguales de este país, y así lo proclamamos.

¡ABAJO EL RÉGIMEN DEL 78! ¡POR LA TERCERA REPÚBLICA!

Convocan: Partido Comunista de España (marxista-leninista), Juventud Comunista de España (marxista-leninista), Partido Comunista de los Pueblos de España, Partido Comunista de Madrid, Izquierda Unida, Unidad Cívica por la República, PML Reconstrucción Comunista, Agrupación Republicana de Móstoles, A. Republicana del Corredor del Henares, Izquierda Republicana, Federación de Republicanos, Coordinadora 25-S, Juventud Comunista de los Pueblos de España.

Espacio Republicano de Madrid. Abril 2021.